martes, 27 de marzo de 2012

Ensayo


















Ojalá toda la música tuviera ese be-bop, be-bop que te hace mover los pies sin parar...

Hello Mr. Thompson

Volver a casa escuchando los sollozos de los niños pequeños que retumban en todo el vagón me pone histérica. No sé dónde está el problema en decir ¡Cállate ya!. Es entonces cuando entiendo que si el Periodismo está medio moribundo, por no decir que es como un zombie corriendo detrás de los titulares y olvidándose de lo que sucede a su alrededor es, basicamente, porque no sabemos que quiere decir callar y escuchar. Me di cuenta el otro día en clase, cuando, en medio de una rueda de prensa a un personaje bastante conocido aunque muy poco implicado en torno a sus respuestas según mis pensamientos, los alumnos, los que presumen de ser periodistas, los que dicen que quieren salvar esta mierda de oficio que huele a cadáver, los que creen en la objetividad y en la información y en la verdad verdadera, desconectaron y se pusieron a hablar y a cuchichear y a reír y a faltar al respeto a aquello que en teoría debería ser la base: el saber observar. Pues bien, sí. Lo que pensaba es cierto. Si esta pandilla de irrespetuosos individuos son los que tienen que renacer al Periodismo, lo llevamos claro, señores. Estamos jodidos.

sábado, 10 de marzo de 2012

mm


Luz de mi vida, pasión de mis pasiones . . .

no future

El principio de los principios no es realmente un principio. No podemos decir '¡Hoy es el día!', ni podremos explicar que todo comenzó ayer. Hay cerebros que deberían callarse y gente que no debería teclear ciertas cosas, antes todo esto no pasaba. Y digo antes por no decir otras cosas. Crisis mentales en manos de animales con ciertas dificultades en conectar la mente con el corazón. Sí. Hace años que hay cosas que no hacen más que caer y caer, y hay grandes espíritus que ya lo dijeron. Hay a veces que no entiendo por qué se olvidan algunos nombres. Por qué se anulan y se sustituyen por gilipolleces sin sentido. Eso es, gilipolleces sin sentido. Vamos, prejuicios, prohibiciones, cosas éticamente correctas y socialmente aceptables, frases filosóficas de gente que ni siquiera sabe que tiene ojos. Gritos de protesta, de ¡venga, vamos!, pero, ¡joder! ¿Te crees que ellos también lo tuvieron fácil? Tuvieron que mezclarse la sangre con otras sustancias para poder entender toda esta mierda. ¿Y el resultado de tantos esfuerzos? Seguiremos andando, andando, andando, andando hasta llegar al corazón de la cuestión. Luego nos lo comeremos y nos sentaremos a fumarnos un cigarro mientras nos reímos de las pequeñas e insignificantes hormigas que corren de un lado al otro para evitar la sensación de sentirse parte de uno mismo y de pensar por uno mismo.

lunes, 5 de marzo de 2012

)


Después de encontrar a I en tu boca, ya no tengo nada más que buscar. Los días grises acaban no siendo tan grises, A sigue desaparecida en su país, y C sigue encogiéndome el corazón con sus susurros. D parece que no vaya a desaparecer nunca, no como el gato de Cheshire, al que le gusta esconderse cuando sale el Sol. La O de color azul hace tiempo que no quiere hablar conmigo porque dice que ya no le sonrío cuando me pregunta cosas y que no paro de apartar el humo que sale de su pipa. Yo sigo pensando que si se camina lo bastante siempre se llega a alguna parte. Aunque no sea la que esperabas.

sábado, 3 de marzo de 2012

more

Nos falta pensar menos y sentir más.
Tantos grandes planes, tantas ganas de tenerlo todo controlado, tantos minutos malgastados, tantas noches desperdiciadas por no saber salirnos del esquema principal...
Acabo de dar la vuelta en dirección contraria. ¡Joder! Ya sé qué me pasa. Me acabo de dar cuenta ahora mismo, hace cinco minutos, mientras pensaba lo rápido que pasa el tiempo y la angustia que me produce pensar que no es infinito. Joder, podría haber caído antes. Podría haberme percatado de que no importa si está todo claro o no, que no importa si no hay nada que hacer porque sólo en estos casos es cuando te llevas las sorpresas más dulces.